La clase de Vicente Barrera y las maneras de Rafael Castellanos

Un año se cumplía de mi percance en la plaza de Pozuelo. Quería experimentar la sensación de volver al lugar. Muchas veces las fechas no suelen coincidir pero este año sí. Se celebraba un festejo mixto en el que estaban anunciados los diestros Martín Pareja Obregón y Vicente Barreda junto al novillero Rafael Castellanos. El festejo se retrasó media hora. La mitad del tendido fue la ocupada por los aficionados. Se lidiaron reses de Hermanos Víctor Romero que dieron buen juego en líneas generales.
Martín Pareja Obregón abría cartel. Un saludo capotero muy particular fue el que realizó a su primero. Verónicas mezcladas con chicuelinas. En la faena toreó por ambas manos permitiéndose adornos y desplantes. Hasta ahí más o menos aceptable su actuación, pero a la hora de ejecutar la suerte suprema se salía todo el rato fuera. Varias veces tuvo que cuadarse para entrar a matar llegando a descabellar.
En su segundo se pudieron ver algunas verónicas sueltas. Faena populista la que realizó para conseguir cortar las orejas a su enemigo, ya que sus compañeros habían tocado pelo. Pero aunque la faena llegó al tendido volvió a fallar con la espada. Una vuelta al ruedo por su cuenta fue la que dio para no irse de vacio.

La clase de Barrera
Vicente Barrera estuvo muy firme toda la tarde. Con su estilo clasico a la hora de interpretar su tauromaquia. Una tauromaquia para los paladares más exquisitos. En su primero mató de estocada desprendida consiguiendo las dos orejas. A su segundo lo mató de un bajonazo, eso emborronó lo realizado en la faena, teniendo que descabellar y cortando tan sólo una oreja.
Cerraba el cartel el novillero Rafael Castellanos. A su primero le dio algunas verónicas sueltas. La faena la basó en la diestra llevando la embestida del eral. Mató de estocada desprendida. Dos orejas. En el sexto se acopló desde un principio a las embestidas del de Hermanos Víctor Romero. A este lo entendió un poco mejor. Pincho y dejó una estocada desprendida. Cortando las dos orejas y rabo. Vuelta al ruedo al eral.