El pasado sábado se celebró en Alamillo una novillada sin caballos, donde actuaron dos alumnos de la Escuela Taurina, siendo para uno de ellos su debut, como es el caso de Emilio Bresó.
Con la plaza casi llena se celebró el pasado sábado una novillada sin caballos en Alamillo, donde había expectación por ver a Emilio Bresó, novillero de Almadenejos. No defraudó a ninguno. Ya que mostró mucha quietud en su toreo. Con el peor novillo consiguió hacer las cosas bastante bien, a pesar de su falta de oficio, que es algo normal al no torear mucho y más cuando ese día fue su debut. Con la espada pinchó pero al final lo mató con el descabello, consiguiendo dos orejas. Rubén Aparicio, el más veterano del cartel también cortó otras dos orejas, teniendo la suerte que le saliera un novillo extraordinario de Hermanos Expósito. El triunfador númerico de la tarde fue Miguel de Pablos al cortar hasta el rabo.
Por Blanco y Azabache
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