“Una feria para partir de cero”

Arranca, un año más, la Feria Taurina de Ciudad Real, no con tanta polémica como en años anteriores, pero sí, con opiniones para todos los gustos, que si falta tal o cual torero, que si son pocas corridas, que si están poco rematados los carteles, que si patatín que si patatán; lo que sí es cierto es que a la Feria le falta calidad y las combinaciones quizás no terminen de agradar al sufrido aficionado de la capital. En cuanto a la cantidad, parece que la empresa ha optado, en mi opinión acertadamente, por dar un número menor de festejos, ante las mediocres entradas que venía registrando nuestro coso en anteriores ediciones, poder consolidar así el ciclo taurino y una vez consolidado, aumentar su oferta.
Puestos a analizar la cartelería, también hay que decir, qué sin ser una Feria de primer nivel, nos encontramos cosas interesantes, como la corrida concurso de ganaderías, donde solo ver anunciados esos legendarios hierros, despiertan siempre el interés de cualquier aficionado aún sabiendo que algunos de ellos no atraviesan su mejor momento, aunque este no sea el caso del ejemplar de Peñajara, al que se espera con gran atención a tenor del juego dado por sus hermanos en el pasado ciclo isidril del abono madrileño. De ellos deberán dar buena cuenta tres matadores de diferentes cortes y estilos, como son los que componen este cartel, entre los que se encuentra el Maestro alicantino, que con su presencia pondrá a prueba la sensibilidad del aficionado de Ciudad Real, teniendo la oportunidad de brindar justo reconocimiento a un torero honesto y uno de los últimos exponentes de la tauromaquia antigua que con su quehacer en el ruedo nos ha traído olores y sabores de toreo añejo, y es que seguramente asistamos al último paseíllo de este matador en nuestra plaza. Como interesante es ver las evoluciones de un torero que debuta en esta plaza, Curro Díaz, que atraviesa un buen momento y al que habrá que mirar con atención, sin olvidarnos de nuestro paisano Aníbal, al que no se le puede negar la constancia y las ganas de ser Torero.
De flojo cartel se puede calificar al anunciado para rejones, donde se conjugan veteranía y novedad casi a partes iguales, pero donde se echa de menos algún nombre ilustre que diera más realce a este tipo de espectáculo.
La empresa ha querido contentar a todos y a la corrida de carácter “torista” del primer día, ha unido otra más “populista” para cerrar feria, que cuenta con el aliciente de ser el primer paseíllo que va a realizar en esta plaza el torero de dinastía Cayetano, y que además viene precedido de un gran momento como demuestran sus últimas actuaciones en Barcelona, El Puerto y sobre todo en Valencia donde cuajó una de sus mejores tardes en lo que va de temporada; desde el punto de vista del aficionado –repito, del aficionado- se entiende menos la inclusión en los carteles de su hermano Rivera Ordoñez, después de pasar sin pena ni gloria en sus últimas apariciones en este coso, ésta claro que desde el punto de vista empresarial, juntar en un mismo cartel a los dos hermanos va a reportar grandes beneficios en la taquilla, o al menos eso parece a priori. El que no debería dejar pasar la oportunidad de darlo todo en esta corrida, ni desaprovechar el tirón mediático de este cartel es Luis Miguel Vázquez, pues un gran triunfo este día sería un buen bálsamo para un torero que ahora mismo no cuenta con un gran número de contratos.
Por cierto, y para terminar, un dato para la historia, el año que viene se cumple el 120 aniversario de la presentación de la ganadería de Palha en Ciudad Real, una vacada que fue santo y seña en esta plaza durante finales del siglo XIX y principios del XX, que lidió numerosas corridas en esos años, y cuyo ganadero reservaba la mejor corrida que pastaba en sus tierras para nuestra plaza, el cartel que conmemoró dicha efeméride fue el siguiente, 17 Agosto 1889 toros de Palha para Manuel Hermosilla y “Currito”. Quizás sea una buena oportunidad para la presente empresa de ponerse a trabajar, y por qué no, celebrar dicha efeméride con una corrida del hierro portugués para el año que viene en nuestra plaza. Estaría pero que muy bien.

Pablo Galán, aficionado taurino