Unos que vienen y otros que se van

El diestro Luis Francisco Esplá anunciaba hace unos días su retirada de los ruedos. La noticia no pilló por sorpresa puesto que era conocido que al maestro alicantino le quedaba muy poco para cortarse la coleta. Esplá iba a estar en activo hasta que su hijo tomara la alternativa y será en 2009 cuando Alejandro se doctore, ejerciendo su padre el padrino. Y ese será, sin lugar a dudas, un día importante para la familia Esplá, porque el hijo recogerá el testigo de su padre. La esencia del de Alicante se verá reflejada en la figura de su hijo, aunque no es lo suyo hacer comparaciones de este tipo, ya que cada uno tiene su estilo propio. Se pueden parecer, pero la personalidad de cada uno es intransferible.
Lo cierto es que Alejandro ha mamado el toreo, teniendo un padre de la categoría del suyo se puede aprender mucho de tauromaquia, porque Luis Francisco es una persona muy sabia en todos los terrenos de la vida, y a la vez muy culta, algo que le ha sabido transmitir a su hijo.
La primera vez que vi torear a Luis Francisco junto a su hijo, fue en el treinta aniversario de alternativa del padre, en la plaza de toros de Almadén. Ese día se presentaba Alejandro al público y no lo hacía como cualquier chaval de su edad, con un traje de luces, no. Iba vestido con un traje de Emilo Tucci, al igual que su progenitor. Esplá es diferente al resto de toreros, tanto en su forma de vestir como en su tauromaquia, y así quiso que fuera ese día. Además que orgullo más grande puede ser para un padre que compartir el triunfo con su vástago. Los dos salieron por la puerta grande, lo mismo que soñarán hacer el día de la alternativa del hijo. Saborear las mieles del éxito juntos, aunque sólo sea ese día, porque después no vuelvan a coincidir, y porque Luis Francisco ponga fin a sus treinta y tres años de carrera ininterrumpida.
A Luis Francisco Esplá se le encasilla con las corridas duras, es por ello que va a seguir matando este tipo de ganado, no va a dejar de ser él por el hecho de terminar una profesión que le ha reportado grandes éxitos. Es más le gustaría torear su última tarde en Alicante o tal vez Madrid, una plaza que le dio tanto, porque cuando iba a retirarse lo lanzó para arriba. Y por esa tarde mítica los seguidores de este maestro pueden estar disfrutando de su exquisita tauromaquia.
El que también ha dicho adiós durante esta temporada ha sido Pepín Liria, otro torero grande que se ha despedido en su Murcia querida por la puerta grande en su encerrona con seis toros, y sus compañeros allí estuvieron, no querían perderse tal evento.
Aunque los más veteranos se corten la coleta, los jóvenes vienen arreando fuerte y son muchas las alternativas que se vislumbran para el año venidero, como la del mencionado Alejandro Esplá y la de Alberto Lamelas, dos novilleros con gran proyección dentro del panorama taurino español. Mucha suerte tanto a los que se van como a los que llegan.