Raquel Montero muestra su sello personal en la fotografía

La fotógrafa taurina Raquel Montero mostró el viernes parte de su archivo personal en una conferencia audiovisual que se celebró en Torralba de Calatrava, un acto organizado por la peña “Tomás Santa Cruz”.

Cada fotógrafo, al igual que cada torero, tiene un estilo propio, algo que le hace diferente al resto de sus compañeros. Cada uno siente el arte de una manera diferente y así lo manifiesta en su obra. Eso le pasa a Raquel Montero con su objetivo. Poseé una sensibilidad especial que se ve reflejada en las instántaneas que inmortaliza tarde tras tarde. Ese momento único, en el que se produce “la magia del toreo” como expresó durante su charla, lo sabe captar, y por ello su obra es admirada por el aficionado.
La Casa de la Cultura de Torralba de Calatrava acogió el pasado viernes la tercera de las charlas que ha organizado la peña “Tomás Santa Cruz” dentro de sus “Jornadas Taurinas de invierno 2009”. En esta ocasión se trataba de una charla audiovisual impartida por la fotógrafa y redactora taurina de El Día de Ciudad Real, Raquel Montero, bajo el título “La tauromaquia con el sello personal del fotógrafo taurino”.
El tiempo no acompañaba pero fueron muchas las personas que se dieron cita para escuchar y sobre todo ver esta interesante charla; entre ellos se encontraban dos profesionales del mundo del toro como son Félix Jesús Rodríguez y Jesús Navas, así como numerosos aficionados de distintos puntos de la provincia como Ciudad Real, Alamillo, Almadén, Almodóvar del Campo y Pozuelo de Calatrava.
El presidente de la peña, Luis García Villaraco, hizo una exhaustiva presentación de la protagonista, tanto a nivel personal como profesional. Partiendo desde dónde nace su afición a los toros hasta cuándo comenzó a dedicarse a la fotografía taurina, que fue allá por el año 2003. En el repaso de su trayectoria destacó también el momento en el que empezó a hacerse cargo del suplemento El Día Taurino, en el año 2004 coincidiendo con el mayor atentado de la historia de España. Agradeció la ayuda prestada tanto para la organización de las conferencias como en otros temas relacionados con la peña.
A continuación, Montero habló de la sensibilidad del fotógrafo taurino. Haciéndose eco de las palabras del torero Víctor Mendes, “el fotógrafo taurino es a la vez torero, necesita identificarse con diferentes tauromaquias para poder así expresar su sensibilidad y expresión como taurino y aficionado”, la conferenciante aseguró que ella en ningún momento se ha considerado torero pero sí se definió como “aficionada y con cierta sensibilidad”. Todo su trabajo fotográfico lo ha desarrollado en las plazas y dehesas de la provincia de Ciudad Real y fuera de sus límites.

Con sello personal
Su exposición audiovisual estuvo muy bien estructurada, comenzando con el destete para continuar con el herradero y los tentaderos, todas labores que se desarrollan en el campo. En esta ocasión quiso mostrar el trabajo que ha realizado en la ganadería de Pinos Bajos, donde pasta la vacada de Víctor y Marín. Posteriormente se mostraron imágenes de cómo entrenan los toreros, en distintos marcos. En el campo, como fue el caso de Aníbal Ruiz, en Las Tablas de Daimiel con Luis Miguel Vázquez y en la playa con Juan Gómez. De los festivales quiso destacar la actuación de Félix Jesús Rodríguez, un hombre de plata al que de vez en cuando se le ve toreando con ese porte que le caracterizó cuando fue novillero.
En la parte más íntima del toreo, Montero quiso mostrar a los aficionados cómo se viste un torero y las imágenes del patio de cuadrillas que tan sólo el fotógrafo es capaz de captar, ya que pasan inadvertidos para el respetable. Instantes únicos como cuando los banderilleros se lían ellos solos el capote de paseo después de haber ayudado al maestro, en esa imagen se pudo ver a Jesús Navas en el patio de cuadrillas de Madrid.
Para finalizar, la fotógrafa quiso incluir imágenes de los tercios con dos toreros de su gusto personal como son Curro Díaz y Morante de la Puebla, imágenes muy bonitas que pudieron saborear todos los presentes.