Tendero, claro triunfador de la quinta de Puerta Grande

Cuatro orejas fue el resultado artístico del joven novillero de Villarta de San Juan, Fernando Tendero, único representante en el certamen Puerta Grande de la provincia de Ciudad Real.

A las cinco y media de la tarde comenzó la ultima de las novilladas antes de las semifinales. En ella estaban anunciados Alejandro Parralo, Pedro Marín y Fernando Tendero, que se enfrentaban a novillos de Fernando Peña. Curioso fue que al final del festejo el mayoral saliera a hombros con Tendero y Marín, ya que el conjunto de la novillada no fue para que se le otorgara ese privilegio, por muchas orejas que se cortaran.
Hacia la puerta de chiqueros se dirigió Fernando Tendero en el tercero de la tarde, algo impropio en este novillero, pero las ganas de no dejarse ganar la partida pudieron con el miedo que produce ver salir al novillo tan cerca. Con un farol lo recibió para después seguir lanceando a la verónica. Muy vistoso fue el galleo por chicuelinas para poner al burel en el caballo. Con los trastos cambiados, tras el brindis correspondiente comenzó su faena muleteril. Tendero se sintió muy a gusto por ambos pitones, dejando un buen sabor en las tandas al natural. En algunas ocasiones el de Fernando Peña no respondía con continuidad al cite de la muleta y tenían que ser de uno en uno los pases. Finalizó con manoletinas para rubricar su obra con una estocada un pelín desprendida. Las dos primeras orejas de la temporada para su esportón.

Y dos orejas más
En el que cerraba plaza no quiso quedarse atrás, de nuevo salió al ruedo un Fernando Tendero con mucha garra, tanto con el capote como con la muleta demostró que está en esto para ser alguien importante, que quiere subir de escalafón y codearse de tú a tú con las figuras del toreo. Volvió a dejar constancia del buen momento que atraviesa con la espada, otro estoconazo que le sirvió para desorejar a su enemigo.
Con tres orejas se fue Pedro Marín de la plaza de toros de Illescas. Dos actuaciones que no dejaron indiferente al respetable. En su primera supo entender al peligroso novillo de Fernando Peña, lo recibió con el capote estirándose a la verónica y con la muleta tan sólo pudo realizar la faena por el pitón derecho, ya que por el izquierdo era imposible. Mató de estocada y dos orejas. El banderillero Sergio Pérez fue herido en la axila izquierda al perder el equilibrio y el novillo ir tras él. Recibiendo una cornada de 10 centímetros que le impidió banderillear en el quinto de la tarde.
En el quinto, la faena no tuvo las mismas consecuencias para Pedro Marín que en su primero, tan sólo una oreja, ya que dio media estocada caída y tuvo que descabellar. Durante la faena tampoco bajó mucho la mano, la mantuvo a media altura en algunas ocasiones sin llegar a ligar por las complicaciones del novillo.
Alejandro Parralo tuvo menos suerte que sus compañeros ya que no estuvo acertado con la espada y perdió los trofeos. Buen concepto del toreo se le vio a este joven que sufrió un revolcón del primero de la tarde, sin consecuencias. Toreó con profundidad, llevando a su enemigo largo, pero por el único pitón que le permitía, el derecho, ya que con el izquierdo fue imposible y eso que lo intentó Parralo. Se notó en algunos momentos la mano del maestro Paco Alcalde. Mató de tres pinchazos y estocada tendida lo que le permitió dar la vuelta al ruedo.
Al cuarto de la tarde pudo cortarle una oreja, que paseó por el coso de la cubierta de Illescas. Aunque en este novillo se vio otro Alejandro Parralo diferente al primero, con necesidad de triunfo, ya que sus compañeros de cartel habían tocado pelo. Se vieron retazos de su estilo personal en varios muletazos.

Ficha del festejo
Ganadería: Seis novillos de Fernando Peña de juego desigual
Alejandro Parralo: vuelta al ruedo y oreja
Pedro Marín: dos orejas y oreja
Fernando Tendero: dos orejas y dos orejas
Incidencias:
La plaza registró tres cuartos de entrada en tarde calurosa.
El banderillero Sergio Pérez fue cogido por el segundo de la tarde propinándole una cornada en la axila izquierda de 10 cm.