Vuelta al ruedo de Fernando Tendero en Venezuela

A pesar de no haber podido hacer campo, debido a las inclemencias meteorológicas en España, el joven novillero Fernando Tendero resolvió muy bien su actuación en la Feria de San Cristóbal.

No era la primera vez que el joven novillero Fernando Tendero hacía el paseíllo en la Feria de San Cristóbal. El año pasado dejó una grata impresión ante la afición venezolano y por ello este año repitió actuación. Es más, para el año que viene lo esperan, no como novillero, sino como matador de toros.
Un serio compromiso tenía Tendero el pasado miércoles en el coso de Tachirense, ya que las miradas estaban puestas en él, no sólo de la afición de ese país, sino también de todos sus paisanos. Después de la cogida sufrida el pasado 5 de diciembre en Quito no se había vuelto a poner delante de un novillo ni de una becerra, ya que su intención antes de reaparecer era hacer campo. Las inclemencias meteorológicas se lo impidieron, tan sólo ha podido torear de salón. Aún así no se notó mucho el no haber estado delante de la cara del animal, puesto que Fernando Tendero resolvió la papeleta con buena nota.
Es más, aparte de sus dos novillos, le tocó lidiar el sobrero, ya que el ganadero lo regaló y quiso que fuera él quien lo lidiara. La pena fue que el juego de los novillos no fuera tan satisfactorio como las ganas que le puso el novillero.

Crónica del festejo
Su primero fue un novillo complicado al que había que lidiar con mano firme. Así lo vio Tendero y le instrumentó varios muletazos para que el de San José de Bolivar supiera quien mandaba. Lo mató de estocada.
Mucha voluntad y paciencia tuvo que poner en el segundo de su lote. El público tachirense vibró con tres tandas de derechazos que le imprimió a su enemigo el joven novillero de Villarta de San Juan. La presidencia pidió que sonara la música en su actuación. Mató de media estocada y descabello, a lo cual el público pidió la oreja. Pero la presidencia no la concedió, lo que sí otorgó fue la vuelta al ruedo.
En el sobrero poco pudo hacer, ya que tuvo la misma condición que el primero de su lote. Tan sólo mostró su oficio y saber estar delante de la cara del novillo. Eso sí, en esta ocasión, con la espada estuvo muy certero.
Fernando Tendero se está labrando un futuro importante en tierras americanas, ya que después de esta actuación se ha ratificado lo que hizo el año pasado en tierras venezolanas. Y sí lo esperan para el 2011, ya convertido en matador de toros, será por algo.
Ojalá el año y siga perfilándose con muchos contratos, ya sea de novillero con caballos, como está ahora mismo, o ya de matador de toros. Puesto que lo importante para un torero es contar con actuaciones, y cuantas más mejor. Eso le sirve de aprendizaje, porque todos los días aprenden algo, ya que no todos los animales son iguales, y deben saber verlos desde que salen de toriles.