Aroma de arte y esencia torera en el festival de Alamillo

El buen juego de los novillos hizo que el festival de Alamillo fuera un éxito, a pesar de que el tiempo se quería eregir como protagonista de la tarde al descargar una nube momentos antes del comienzo del festejo.
Ficha del festejo
Ganadería: Antonio y Manuel Tornay
nobles y con clase, obteniendo el premio de la vuelta al rueda el lidiado en cuarto lugar y el sobrero, que hacía quinto. Carnicerito de Úbeda: oreja
Antón Cortés: dos orejas Luis Miguel Vázquez: dos orejas. David Mora: dos orejas y rabo. Fernando Tendero: dos orejas.

Durante la lidia estuvieron muy bien Félix Jesús Rodrígues y Manuel Castellanos.

Con algo de retraso, debido a las inclemencias meteorológicas, dio comienzo el festival taurino en Alamillo. Durante la lidia del primer novillo los paraguas llenaban el tendido, aunque cuando ésta llegaba al final fueron despejándose. La nube se fue pronto para dar paso a lo que aconteció en el ruedo, arte y torería a raudales por parte de los toreros.
Abría cartel Carnicerito de Úbeda saludando por verónicas y siendo volteado en una de ellas por lo resbaladizo del terreno, al quedársele el novillo muy debajo.El percance no llegó a mayores. Continuó con su bello saludo. En la brega Félix Jesús Rodríguez también resbala delante de la cara del novillo. Comienzo de faena del de Úbeda muy artístico sacándose al novillo a los medios. Buenas tandas aunque el de Hermanos Tornay las descomponía al flatarle las fuerzas o no estar afianzado en el ruedo. La faena alcanzó altos vuelos al final sobre todo en una tanda por la izquierda. Una pena que su obra quedara emborronada con la espada. Pinchó un par de veces, dejando una estocada defectuosa y teniendo que descabellar.
Antón Cortés lanceó despacio y con cadencia. Buen par de Félix Jesús Rodríguez. La faena la basó en la mano diestra dejando pasajes muy bellos. Por la izquierda el novillo se distraía mucho y no le dejaba practicar el toreo. A mitad de la faena tuvo que irse a la querencia del animal para poder sacarle mayor partido. Cambiando los terrenos el astado le permitió hacer su toreo y deleitar con su estilo a los allí presentes. Retazos gitanos afloraron durante la lidia. Estocada casi entera y un pelín caída.
Con un fajo de verónicas recibió Luis Miguel Vázquez al que hacía tercero de lidia ordinaria. Quite de David Mora por chicuelinas muy ceñidas a su cuerpo. Sensacional estuvo en la brega el banderillero local, Félix Jesús Rodríguez. El novillo enseguida se vio podido. Antes de que Vázquez cogiera la franela. Flexionado se lo sacó a los medios para que no se aquerenciara. Muy templado y despacio con la diestra le dio dos tandas. Con la izquierda el novillo se distraía mucho y era imposible ligar. En mitad de la faena se fue reculando a la barrera donde tuvo que terminar la faena Luis Miguel Vázquez ciñiéndose mucho a la embestida del astado. Remató la faena con una estocada un pelín tendida.

Único rabo del festejo
David Mora se fue hasta toriles para recibir al de Hermanos Tornay a porta gayola, pero el animal ni se fijó en el matador. Salió en otra dirección. Aún así, Mora no se inmutó, y siguió con las rodillas clavadas en el albero para darle dos faroles en el tercio, continuando a la verónica con gusto y rematando con media y revolera. El matador compartió banderillas con Félix Jesús Rodríguez. El son de este novillo auguraba una buena faena. Así lo entendio David Mora que le realizó la lidia correspondiente. Bajando la mano y llevándolo con temple, profundidad y hondura. Sintiéndose el torero y transmitiéndolo a los aficionados. Estocada desprendida.
Cerraba el cartel el novillero Fernando Tendero que lidió el sobrero. Buen saludo capotero con mucho temple y meciendo las verónicas que dio a su enemigo. El secreto del toreo de Tendero es torear muy despacio. Bien en la brega Manuel Castellanos. La mejoría de este novillero, que está recién debutado con picadores, es asombrosa. Cada día está más en torero. La faena la compuso por ambas manos con temple, rematando con detalles muy artísticos. Pinchó la primera vez pero al cambiarle los terrenos al novillo dejó una estocada en todo lo alto, hasta los gavilanes que el respetable supo ver.

El duende afloró en los toreros

Tanto en los matadores de toros como en el novillero y banderilleros afloró el duende en el festival que todos los años se celebra en esta localidad situada en pleno Valle de Alcudia. Los aficionados que allí se dieron cita disfrutaron del arte y la torería de los actuantes.