Empate a una oreja en la primera semifinal en Illescas

La primera de las semifinales del Certamen Puerta Grande ya se ha
celebrado. El ganado no dio opción a los lidiadores para que el triunfo
y la emoción fueran mayores. Oreja por coleta para los diestros
actuantes.

Tras hacerse el sorteo de los finalistas del Certamen, el primer cartel
quedaba compuesto por Eugenio de Mora, Aníbal Ruiz y Serranito.
Liándose toros de Alcurrucén. Sobre el papel un cartel muy atractivo.
Tres toreros con tres estilos diferentes que por méritos propios
consiguieron pasar a esta segunda fase. Pero como todo en la vida,
llegó el toro y descompuso todas las faenas.
Tan sólo el tercero mostró su condición de bravo. Los seis ejemplares
de Alcurrucén estuvieron muy bien presentados, y digo muy bien puesto
que los pitones eran aceptables para una plaza de tercera categoría. No
salieron como en el primer ciclo, que era vergonzoso ver a los astados
salir de toriles con los pitones sangrando. Algo se ha mejorado al
respecto. Esperemos que las dos próximas corridas que quedan sigan la
misma tónica.

El oficio predominó ante todo
Ante ejemplares tan serio que salieron por chiqueros era de presuponer
que alguno embestiría con raza. El primero que le tocó en suerte a
Eugenio de Mora mostró cierto peligro. El diestro de toledo mostró su
oficio estando por encima de su ejemplar. Falló con la espada, cosa
rara en él, lo cual le privó de puntuar. Sí lo hizo con el cuarto que
se dejó un poco más, aunque el animal no terminó de emplearse en la
muleta del toledado. Aún así estuvo muy templado y firme con él.
Terminó su faena con un magnífico volapié.
Aníbal Ruiz tuvo dos enemigos diferentes, a los cuales supo realizar el
torero que requerían. En su primero llegó al tendido con la ligazon al
final de faena en los circulares invertidos que realizó. La estocada le
permitió el corte de un apéndice.
Con el quinto de la tarde, un ejemplar que dejó crudo en el caballo
para ver si le aguantaba en el último tercio, la faena la basó por el
pitón derecho. El fallo con la espada le cerró la salida por la Puerta
Grande.
El mejor toreo de la tarde llegó de las manos de Serranito con el
tercero de la tarde. Aunque el diestro afincado en Albacete tardó en
cogerle las distancias. Pero las tres tandas por el pitón izquierdo
merecieron la pena.
Con el sexto no tuvo la misma suerte. Le tocó el peor de todo el
encierro, al cual se tuvo que sacar a los medios para conseguir sacarle
algo de provecho.

Publicado por Prado Dorado