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18 abril 2008

Pasión y locura de Hermanos Garzón por su ganadería


Cuatro jóvenes; Alfonso, Luis, Antonio y José María que se quedaron huérfanos muy pronto, siendo aún unos adolescentes decidieron crear su propia ganadería, puesto que desde siempre han sido muy aficionados gracias a su padre.
Fue allá por el año 1993, concretamente en el mes de marzo cuando tres jóvenes de edades comprendidas entre los 18 y 20 años decidieron aventurarse y crear su propia ganadería: Hermanos Garzón Mergelina. Cuatro chavales que se habían quedado huérfanos. Tenían una vida por delante que no iba a ser nada fácil, aún así quisieron hacer realidad un sueño que tenían desde siempre, criar sus propios toros. Esa pasión que sienten por este mundo, la han llevado hasta el extremo de convertirse en unos ganaderos que se están abriendo paso dentro de la cabaña de bravo.
Alfonso, Luis, Antonio y José María luchan por sacar adelante este proyecto. La pasión y la locura que sienten por el mundo del toro a veces se convierte en enfermedad para ellos. Una enfermedad sana que les da más alegrías que disgustos. Por ejemplo el Domingo de Ramos cuando vieron como el presidente indultaba al primer ejemplar que pronto se convertirá en otro de los sementales que tienen. Pero éste semental es suyo. Un orgullo muy grande el de un ganadero por ver que después de tantos años de pruebas y de cruces consiguen sacar un ejemplar con los carácteres necesarios para transmitirlos a sus sucesores.

Inicios
Nadie dice que es fácil iniciar algo en la vida, y menos aún una ganadería. Aquel mes de marzo comenzaron los hermanos Garzón Mergelina con 50 vacas de Juan Arenas, al igual que los sementales también eran de ese hierro. Después fueron reemplazando esas vacas por las de Cuvillo. Los Hermanos Garzón tenían amistad con Joaquín Núñez del Cuvillo y con su hijo Álvaro y pronto empezaron a traer vacas y sementales de dicho hierro para ir sustituyendo el anterior ganado.
Así comenzaron su nueva andadura. Ahora cuentan con 180 vacas de vientre y 4 sementales. Aunque no siempre los mismos sementales cubren a las vacas, puesto que intercambian los sementales con un primo suyo y con Cuvillo. De esta forma es mucho más amplia la gama de sementales. Puesto que el abanico entre las hembras y los machos es más grande y es mucho mejor, aseguraba el ganadero.

Objetivos
Lo que intentan los hermanos Garzón Mergelina es que sus toros vayan de menos a más. Para ellos “el caballo es el medio para un fin”, no es el fin en sí mismo. El fin es el torero. Lo realmente importante, y tal y como está hoy en día el toreo, es la muleta. Puesto que el nivel de exigencia del toro es grandísimo. “Porque las puyas son grandes, el caballo pesa muchísimo y se les somete a un esfuerzo grandísimo”. “También el concepto del toreo clásico exige mucho al toro, la humillación es importantísima, las faenas son mucho más grandes que antes, el trazo y el recorrido tiene que ser más largo. Por ese motivo el toro bueno tiene que ser de menos a más”.

Tareas
El éxito de estos ganaderos reside en que todo lo hacen juntos. No dan un paso sin que los otros sepan lo que están haciendo. Aunque cada uno se encarga de una cosa pero al final están muy coordinados. En los tentaderos deben estar Luis, Antonio y Pepe (como se le conoce familiarmente a José María) para hacer la selección. Alfonso deja a sus hermanos las riendas de la ganadería, él prefiere desempeñar el papel de aficionado, y los acompaña a las plazas donde lidian.
Antonio nos narra las tareas que desempeña cada uno de ellos: “Pepe es el que más viene al campo. Está más encima del tema de la alimentación, la sanidad, vacunas y saneamiento. Luis lleva el tema de subvenciones, papeles y bancos. Y yo me encargo de la genealogía, los libros.
Una forma de que todo funcione bien es la organización. Tienen claro que a partir de este año van a lidiar 7 u 8 festejos. Quieren ir acortando las novilladas para ir ampliando las corridas. No tienen prisa por llegar a plazas importantes, ya que es más importante entrar en el circuito de las figuras. De este modo la ganadería coge más auge. Lo de las plazas importantes vendrá sobre rodado.
En la temporada 2007 lidiaron una corrida de toros, cuatro novilladas y una sin caballos. Lo resultados no fueron malos, al contrario la nota que ponen es medio alta. En Valdepeñas se estrenaron como ganaderos, y les quedó la pesadumbre de ver como hubieran reaccionado sus novillos con manos más expertas, puesto que era una novillada muy fuerte para los chavales de la escuela taurina. Estos jóvenes ganaderos no han dudado ni un momento en apoyar a los que empiezan y por ello se han volcado con la escuela de Ciudad Real, tal vez el hecho de que José María Garzón regente la empresa Ruedos Bravos haya influido en ello.

Los mimbres de la fiesta
Según palabras de estos jóvenes ganaderos andaluces los mimbres de la fiesta están en la ganadería, por ello el reglamento debe cambiar para que se indulten toros, ya que hace unos años en una plaza de tercera donde lidiaron uno de sus ejemplares no le pudieron perdonar la vida por ser plaza de tercera. Señalaban que cuesta mucho buscar las hechuras y las reatas si no se indulta, a parte que el público siempre lo va a pedir.