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12 agosto 2010

“Trabajamos con la ilusión del futuro y queda mucho presente por andar”

El trabajo que viene desempeñando la empresa Maxitoro desde que el año pasado se hicieran cargo de organizar la Feria Taurina de la capital se está viendo recompensado en los abonos, hasta un 30% más este año.
Es fácil decir que los abonos se han incrementado en un 30% con respecto a los del año pasado, pero no es tan fácil conseguirlo. Si la empresa Maxitoro ha logrado alcanzar esas cifras es debido a su trabajo, ya que fue esa la bandera con la que llegaron a Ciudad Real, según comenta Víctor Zabala de la Serna, uno de los empresarios de Maxitoro “Llegamos con la bandera del trabajo, la ilusión y seguimos con la misma bandera. Trabajamos con la ilusión del futuro y queda mucho presente por andar”.
Una bandera que es envidiable para muchos, puesto que con el esfuerzo y el trabajo están consiguiendo que Ciudad Real vuelva a sentir los toros como antaño. Que el ambiente que existía cuando llegaba la víspera de la feria haya vuelto a renacer en los aficionados. En los jóvenes y en los que no son tan jóvenes.
Tanto Maximino Pérez como Víctor Zabala de la Serna sabían la apuesta tan difícil que era estar al frente de la feria de Ciudad Real. Aún así asumieron el compromiso con mucha responsabilidad. La responsabilidad que hoy día siguen teniendo. Aún es pronto para hablar de los resultados de la feria, de si volverá a ser un éxito como lo fue el año pasado, puesto que hacía mucho tiempo que no salía tantos toreros por la puerta grande. De nueve toreros que hicieron el paseíllo, fueron siete los que salieron en hombros. Un balance importante para el caché de Ciudad Real.
Cuando antes a un torero se le hablaba de la feria de Ciudad Real había cierto resentimiento por torear en esta plaza, situación que han solventado y con creces la empresa Maxitoro. Ahora el ambiente es mucho más agradable, e incluso los toreros se sienten motivados a venir al coso ciudadrealeño, según asegura Víctor Zabala.
Si calificamos la feria taurina de Ciudad Real para Víctor Zabala de la Serna es “una feria con buqué, con sabor, muy entendiada y agradecida, por la que al final fue una feria triunfal”.
Ese triunfo del que hablaba uno de los empresarios de la empresa Maxitoro puede volver a repetirse este año, puesto que la categoría de los carteles es similar a la del año pasado. Ahora faltan que embistan los toros.
El aficionado habrá podido observar que este año en los tendidos de sol es donde mayor descuento se ha aplicado, hasta un 35% menos con respecto al año pasado. Por lo cual, este trabajo que ha llevado Maxitoro ha sido compensado con el aumento de los abonos en un 30%. Todo ello es el fruto de la cosecha que sembraron el año pasado. Un trabajo bien hecho ve sus frutos inmediatamente.