ir arriba

12 agosto 2012

Emotividad en el aniversario de Sánchez Mejías

Festival taurino flamenco conmemorativo del 78º aniversario de la muerte de Ignacio Sánchez Mejías. Con un cuarto de plaza se han lidiado 3 erales de la ganadería de Manuel Ángel Millares nobles y de juego desigual. El rejoneador Miguel Ángel Martín, dos orejas El matador de toros Luis Miguel Vázquez, vuelta al ruedo El novillero Carlos Aranda, oreja. ¡Que no quiero verla! Dile a la luna que venga, Que no quiero ver la sangre De Ignacio sobre la arena…. Con estos versos comenzó el recital poético y la ofrenda floral en el lugar donde había sido prendido por Granadino el diestro-poeta Ignacio Sánchez Mejías hacía 78 años, en ese tendido siete que no olvidarán los mazagatos. Acompañado de música flamenca los toreros lidiaron tres ejemplares de Manuel Ángel Millares. El primero le correspondió al rejoneador Miguel Ángel Martín que supo estar por encima del novillo que le tocó en suerte. Un ejemplar que se encelaba fácilmente con la montura del caballero. Muy a gusto estuvo Martín que tras clavar un rejón de castigo demostró la compenetración que tiene con sus caballos en banderillas. Varios fueron los equinos que realizaron este tercio, destacando las banderillas cortas y el par a dos manos. Con el rejón de muerte estuvo muy acertado, el de Millares rodó sin puntilla. Luis Miguel Vázquez pechó con el peor novillo un manso de solemnidad, y eso que en el capote demostró lo contrario. Verónicas mecidas las que pudo dar el daimieleño, eso fue lo único de buen gusto que pudo sacar de su faena, ya que tras banderillas el novillo se rajó y tuvo que hacer la faena pegado a tablas sin gran lucimiento ya que no humillaba nada. Con la espada no estuvo muy acertado ya que su enemigo no colaboró cerrándose en tablas. Mejor suerte tuvo el novillero Carlos Aranda que con el capote toreó por verónicas y tafalleras. Con la muleta casi toda la faena la realizó por el pitón derecho, bajando mucho la mano y templando al novillo. Otra historia era el izquierdo, aunque lo intentó pero la embestida no era la misma. La faena hubiera sido de más trofeos si con la espada hubiera acertado a la primera que tras varios pinchazos y una estocada contraria tuvo que usar el descabello. Durante la lidia las faenas estaban amenizadas por la voz de Ángel Portillo “El Porti”, María Ángeles de Almedina o Roque Barato acompañados en la guitarra por Quintana de Valdepeñas y Luis Fernández y en la percusión Antonio “El Jaro”.