01 septiembre 2013

Pablo Alborán seduce con su voz en Daimiel

Miles de fans acompañaron al cantautor malagueño en el Auditorio Municipal



Pablo Alborán es un artista tan carismático y polivalente, que allá donde va causa el delirio entre sus más fieles seguidores. Desde la noche del viernes esperaban al cantante. Y horas antes de que las puertas del recinto se abrieran la cola era impresionante, es el efecto Pablo Alborán. Como lo fue durante el concierto la cantidad de personas que pasaron por protección civil para ser atendidas por el estrago que estaba causando el malagueño con sus canciones.

Decir que Pablo Alborán ‘enamora’ a sus fans, no es algo nuevo. Sucede cada noche de concierto, como sucedió ayer en Daimiel. Desde que se dio a conocer este joven malagueño, con un video en Youtube, encandiló a propios y extraños. Llegando a tener un público de todas las edades con esa voz aflamencada que embelesa nada más escucharla.



Sus fans más incondicionales estuvieron aguardando a las puertas del Auditorio Municipal de Daimiel para ver al artista en primera fila y no perder el más mínimo detalle. Puesto que Alborán fascina desde la primera a la última de las canciones que interpreta. Un total de veinticuatro temas salieron de su garganta. Una garganta con una voz singular y extraordinaria que seduce desde los primeros acordes.

A las once en punto de la noche empezaron a desfilar por el escenario los músicos que acompañan a Pablo Alborán en su gira, para presentar su tercer disco ‘Tanto’. Un disco con un giro muy diferente a los anteriores, donde el artista ha querido darle un toque más pícaro. Tras las primeras notas de ‘Toda la noche’ apareció Alborán en el escenario, como bien comienza la letra de su canción, “como un cuento infantil”, donde surge del fondo del decorado entonando la melodía. El fervor de los más de ocho mil espectadores que se dieron cita en el Auditorio surgió nada más verlo.



Vestido con un vaquero y una camiseta, mostrando esa sencillez que le caracteriza, fue llenando cada rincón del escenario y del recinto con su voz aterciopelada y potente. Voz que fue acompañada a coro por las miles de fans que se sabían todas sus canciones desde ‘Toda la noche’ a ‘En brazos de ella’.

Fue una noche mágica en la que el recinto se rindió a la voz del artista y el cual no dio un respiro a los espectadores para que vibraran con cada una de sus canciones. Tras la toma de contacto con la primera melodía siguieron temas como 'Deshidratándome', 'Me iré', 'Yo no te olvidaré', 'Yo no lo sabía'.

El momento más dulce de toda la noche llegó de la mano de los acordes de ‘Caramelo’ con una voz aflamencada que surgió de sus labios. Una dulzura que embriagó los sentidos de los allí presentes. Continuando el espectáculo con temas como ‘Dónde está el amor’, ‘¿Quién?, ‘Ahora’ y ‘Seré’.

El punto álgido del concierto llegó con ‘El beso’, ‘Perdóname’ y ‘Te he echado de menos’ que interpretó en acústico y que emocionó a los allí presentes. En homenaje a sus raíces francesas y con la dedicatoria de “a una persona que ya no está”, cantó ‘Le vie en Rose’ dando la magnitud de artista que es. Por eso en tan poco tiempo ha cosechado los éxitos que le preceden.



La complicidad con el público era total, rendido ya a la voz del malagueño se entregaban a cada melodía que salía por sus labios. Unos labios que no dejaron de crear esa simbiosis que existe entre un artista y sus fans. Como pudo ocurrir con ‘Mientes’, ‘Vuelve conmigo’ donde hizo un parón para presentar a los músicos que le acompañan en el escenario. Continuó con ‘Me colé por la puerta de atrás’ y ‘Loco de atar’. Volvió a interpretar en acústico ‘Cuando te alejas’.

El espectáculo estaba llegando a la cúspide más alta. Y para ello en solo de guitarra deleitó con ‘Desencuentro’. Tras este tema todos los músico, incluido Pablo Alborán abandoraron el escenario. La espera fue mínima y el respetuoso público acogió al artista que se sentó frente al piano, en una atmósfera de lo más íntima, para cantar la canción con la que se diera a conocer: ‘Solamente tú’. A esta le siguió ‘Éxtasis’ donde el arrebato y la pasión se filtraban por cada poro de su piel.

La sorpresa llegó en la penúltima de las canciones, donde por medio de un video apareció Pablo Alborán vestido de cowboy. Y al ritmo de la música y con una coreografía del oeste surgió de su garganta la letra de ‘Volver a empezar’.

El broche de oro llegó con los versos de ‘En brazos de ella’. Dos horas intensas de concierto en el que la voz cálida y tierna del malagueño se entremezcló con la complicidad y la pasión que sintieron las más de ocho mil personas que se dieron cita en Daimiel.




2 comentarios:

  1. EL MEJOR REPORTAJE TAURINO QUE HE VISTO...ja,ja

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  2. A qué molaaaa. Este chico se merecía un hueco en el blog.

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